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lunes, 1 de julio de 2013

La Ayuda de los Cubanos a la Independencia de Estados Unidos:


Las Damas de la Habana


René  León

  Por mucho tiempo se ha discutido si fue verdad la ayuda de Las Damas de la Habana, a la independencia de los Estados Unidos. Como es natural nadie va a encontrar en los libros de historia  nada referente a la ayuda económica  a la Revolución Norteamericana, primero porque los historiadores, son olvidadizos y al reconocerlo nos darían un mérito que ellos creen no nos lo merecemos. De que son MALAGRADECIDOS, lo son. Y es como dice el ya desaparecido Dr. Herminio Portell Vilá, en su libro Los Otros Extranjeros en la Revolución Norteamericana, Ediciones Universal, Miami, 1978 : “Y es que todavía en los Estados Unidos los historiadores prefieren o ignorar o restar importancia al aporte español e hispanoamericano a la independencia norteamericana, como si creyesen que el reconocimiento de esa verdad pudiera rebajar importancia a la obra grandiosa y memorable del general Jorge Washington y de su Ejército Libertador, así como del Congreso Continental”.
  Portell Vilá venía preparando desde hacía años en Cuba un texto donde ampliamente iba a explicar sobre la ayuda a norteamérica, pero los cambios políticos, le impidieron terminarla, y no sólo eso, el perder toda esa documentación en el año de 1960.
  Pero vayamos a lo de la ayuda, pues hay mucho material sobre ello, y no podemos extendernos, iremos a los datos principales. El gobierno de Washington no tenía crédito, nadie le facilitaba dinero para pagar a los soldados y comprar suministros. Francia se había comprometido en enviar una fuerza naval nunca antes vista, compuesta de 23 naves y 3,200 soldados. Al mando de DeGrasse, sale con rumbo a las islas del caribe y luego para Haití, al llegar se encuentra con la situación de que no pudo recibir ningún tipo de ayuda, e hipotecó sus propiedades, con la esperanza de que en Cuba podía recibir el dinero que necesitaba, para pagarle a sus tropas y a las norteamericanas. Se necesitaban 1,200,000 libras tornesas. Al llegar a La Habana recibe la ayuda del coronel Francisco de Miranda, ayudante del general Cajigal y nacido en Venezuela. Miranda era muy apreciado en la sociedad de La Habana y Matanzas. El fue quien con su manera  de ser y caballerosidad, pudo reunir a las familias pudientes en especial a las Damas de la Habana, y la familia Menocal, la cual tenía una hacienda en Ceiba Mocha. Se vendieron las joyas, y objetos de arte, se dio una fiesta para colectar dinero, más familia que abonaron grandes cantidades y se pudo reunir, las 1,200.000 libras tornesas. La escuadra francesa se hizo a la mar, en la fragata “L’Aigrette” embarcó el valioso cargamento.
  Stephen Bonsal, en su libro When the French Were Here, Ford Washington, N.Y., 1945, pp.119-120, dice:”…el millón 200 mil que se le dio a St. Simon por las señoras de La Habana para pagar a las tropas americanas, puede con verdad ser considerado como los cimientos sobre los cuales se erigió el edificio de la independencia Norteamérica”.
   José Agustín Balseiro, en su libro Presencia Hispana en la Florida: Ayer y Hoy: 1513-1976, dice: “ El profesor cubano de la Old Dominion University de Norfolk, Virginia, José Simón, publicó desde el 13 de diciembre de 1974, un documentado artículo donde se destacan los nombres de Miranda y Cajigal”.
  El profesor José Simón, en su artículo “Los cubanos salvamos a George Washington”, Miami, 13 de diciembre de 1974, en el Diario Las Américas.. Según se habrá comprobado, no fue sólo ese hecho aislado, sino varios que señalamos y otros que señalaremos, evidencia de la serie de aportaciones hispánicas a la victoria de las Trece Colonias Pero, en efecto, la contribución de las Damas de La Habana, cuando las arcas de Washington y las de Rochambeau estaban casi exhaustas, fue muy importante para vencer terminantemente a Cornwallis


René  León


4 comentarios:

  1. ya habia oido hablar e las cubanas a la Independencia de Estados Unidos. Pero en la ensenanza en Cuba nunca oir hablar de ella, a solo a los viejos que se habian educado antes, alla por los de 1940. Me gusta saber estas cosas.

    Raimundo Cabrera
    Miami, Florida

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  4. Muy interesante este escrito del amigo René León, que aclara de manera definitiva, la contribución que las “Damas de la Habana” aportaron a la revolución americana, precisamente, cuando las arcas de Washington y Rochambeau, estaban casi exhaustas.
    Este escrito de René, como todos los suyos siempre nos muestra la verdadera cara de la Cuba de ayer, siempre al lado de la Democracia.

    Herminia D. Ibaceta

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