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domingo, 1 de noviembre de 2015

Los periódicos de Santiago de Cuba durante el siglo XIX

CARLOS RAIDEL NARANJO PACHECO Universidad de Oriente Santiago de Cuba raysicuba@yahoo.es 

La historia local de la prensa santiaguera es muy rica, y por ello no puede ni debe de ser olvidada. Este segmento de la vida local de Santiago de Cuba fue pródigamente descrito por el testimonio de J. Ma. Ravelo, 1 miembro de esta familia poseedora de casas editoriales e imprenta durante el siglo decimonónico en la localidad, por lo que se consideró oportuno reescribir la información aportada por este autor, a pesar de no aparecer debidamente acotada la fuente original, con el fin de presentar una breve caracterización de los periódicos santiagueros. 

Reseña histórica de los periódicos de Santiago de Cuba A finales del siglo XVIII se produce la aparición del primer periódico en Cuba, El Papel Periódico de la Habana (1790-1848),2 que posteriormente se transformó en el órgano de oficial de Gobierno colonial (rebautizándose con varios nombres). En la evolución de esta publicación se señalan los siguientes momentos: 3 
• En 1805 se renombró como El Aviso hasta 1808 
• 1809-1810 se llamó Aviso de la Habana 
• 1810-1812 Diario de la Habana 
• 1812-1820 Diario del Gobierno de la Habana 
• 1820 Diario Constitucional 
• 1820-1823 Diario del Gobierno constitucional de la Habana 
• 1823-1825 Diario del Gobierno de la Habana 
• 1ro febrero de 1825- 3 febrero de 1848 Diario de la Habana 
• Finalmente adopta el nombre de Gaceta de La Habana 

En Santiago de Cuba se introduce la imprenta en 1792, establecida por el español Don Matías Alqueza, quien fue su primer impresor y dueño. En esta época se producen algunos cambios sociales, bajo la influencia de las ideas de la revolución francesa y del gobierno de Sebastián Kindelán, militar español liberal.

El primer periódico colonial de Santiago de Cuba surge el 15 de agosto de 1805, El Amigo de los Cubanos fue fundado por la Sociedad Económica de Amigos del País en la imprenta de Matías Alqueza, siendo José Villar, José Joaquín Navarro y Matías Alqueza sus redactores. 

El segundo periódico publicado en la localidad fue el Canastillo por Manuel Pérez en la imprenta de Alqueza, más tarde surgen, El Preguntón y el Discurso Patriótico dirigido por el Sub-teniente Juan Valiente. En 1808 circulaba en la capital oriental de Cuba La Gaceta de Jamaica.4 

En este mismo momento se produce un auge de publicaciones de los periódicos locales santiagueros, como efecto de la libertad de imprenta decretada por las Cortes de Cádiz (1810-1814) 5 en España; algunos títulos que surgieron en esta etapa de cambios legislativos coloniales fueron: 6 • 
El Ramillete de Cuba (1812) 
• El Eco Cubense 
• La Miscelánea Liberal de Santiago de Cuba (1812)7 Abolidas las Cortez de Cádiz en España por Real Decreto del 4 de Mayo de 1814, y suprimida su legislación y la libertad de imprenta, se produce nuevamente una etapa de censura y silencio de la prensa santiaguera. Posteriormente en 1820, se restableció en Cuba la Constitución y en Santiago de Cuba se proclamó el 20 de mayo del mismo año la Constitución y la libertad de imprenta. Como efecto directo a esta medida continúan apareciendo nuevos títulos de periódicos, entre ellos: 8 
• La Minerva (1820) dirigida por Francisco Muñoz del Monte e impresa en la Imprenta Liberal a cargo de Luis Pebler y luego en la del Seminario de San Basilio Magno, a cargo de José Eugenio Toledo. 9 • 
El Dominguillo (de corte satírico) y El Noticioso Observador en la imprenta de Loreto Espinal. 
_Notas___________________________________________________________
1 Ver J. Ma. Ravelo (1943) La ciudad de la historia y la guerra del 95. La Habana: Impresores Ucar García s.a. 
2 Aunque anteriormente se habla de la publicación de La Gaceta de la Habana (8 noviembre de 1782) impreso por la Capitanía General de la Isla Esta contenía noticias extranjeras, noticias oficiales españolas, noticias varias, tarifas del pan y carnes, bandos del Capitán General Juan Manual Cajigal, para la extinción del gremio de panaderos y un suelto al público. Ver Tamayo, Miguel A.; Virgilio Ferrer y Lisandro Otero (1935) El periodismo en Cuba. La Habana: Directorio de la Caja de Retiro de periodistas. 
3 Ver Tamayo, Miguel A.; Virgilio Ferrer y Lisandro Otero, op cit. 
4 Ver Callejas J. Ma. (1911) Historia de Santiago de Cuba. La Habana: Imprenta La Universal. 
5 Se reconocían derechos básicos como la libertad de imprenta, la igualdad jurídica o la inviolabilidad de domicilio, que serían la base del nuevo modelo social, a partir de una concepción individualista de los principios de libertad, igualdad y propiedad, Ver J. Cano Bueso (1989) Materiales para el estudio de la Constitución de 1812. Madrid: Tecnos. 
6 Ver “Historia de los periódicos en Oriente”, en El Álbum, Santiago de Cuba, 31 de mayo de 1891, no. 4. 
7 Papel oficial del gobierno de Santiago de Cuba, sustituto de El Observador… en 1821. Ver J. Llaverías (1957) “Preámbulo”, en Contribución a la historia de la prensa periódica, Tomo I. 
8 Ibídem. 
9 El segundo número de esta publicación fue mandada a secuestrar por Jefe Supremo Político siendo absuelto por el tribunal de imprenta llamado “Mesa Censoria” al declarar que el escrito denunciado no era subversivo ni abusivo de la libertad de imprenta (J. Ma. Ravelo, op cit.). 987 
• La Corbeta, órgano de los reaccionarios anticonstitucionales. 
El 10 de diciembre de 1822 quedó abolida nuevamente la Constitución y de nuevo se implanta la censura a partir de 1823. Durante esta etapa se publican: 
• El Papel Oficial del Gobierno y El Diario de Santiago de Cuba en la imprenta del Seminario. 
• El Real Consulado imprime El Noticioso Comercial, que circuló entre 1833-1835. 
• El Redactor, 10 este periódico fue fundado por la Real Sociedad Económica de Santiago de Cuba 1ro de enero de 1833 con el nombre de El Redactor de Santiago de Cuba11, siendo sus redactores Juan Bautista Sagarra, Domingo Martínez y Agustín de la Tejera. Es considerado el más importante en esta localidad durante los primeros 50 años del siglo XIX, donde colaboraron notables escritores de la capital oriental, y del resto de la isla. También tuvo varias denominaciones en diferentes épocas:12 ƒ 
El Redactor de Santiago de Cuba (nombre fundacional en 1833) ƒ 
El Cubano Oriental (desde 1936) ƒ 
El Redactor. Diario de Santiago de Cuba (desde 17 mayo 1838) ƒ 
El Redactor (1843) ƒ 
El Diario Redactor (desde 1844) ƒ 
El Redactor. Diario de Santiago de Cuba (1846) ƒ 
El Diario Redactor (1848) ƒ El Redactor (1850) ƒ 
El Redactor. Diario de Santiago de Cuba (1850) ƒ 
El Diario Redactor de Santiago de Cuba (1850) 

El Redactor deja de publicarse el 17 de noviembre de 1866, año 33 de su publicación. En 1836 se restaura la Constitución de 1812, y se sustituye El Noticioso Comercial por el de El Diario Constitucional; aparece La Libre Imprenta que más tarde se tituló El Eco de Cuba. Luego se editan: 
• El semanario Los Ensayos Literarios impreso por Martínez y redactado por José Joaquín Hernández, entre otros. 
• El poeta Antonio Ma. Lorié publica el periódico literario Ecos de Yarayó. 
• Aparece el primer número de La Lira Cubana que dirige el maestro compositor y violinista Laureano Fuentes. 
• En 1850, se edita El Orden en la imprenta de Miguel Martínez, dirigido por el teniente Coronel D. José Ma. Gómez Colón. El Orden y El Redactor se fusionan tomando el nombre de El Diario Redactor. 
• Con Vicente Jústiz como director y Francisco Javier Vidal como administrador propietario se publica el periódico literario Semanario Cubano, cuyo segundo director fue Juan Nápoles Fajardo (El Cucalambé). 
• Hacia 1856 parece El Vespertino, diario de ciencias, artes, religiones, literatura y comercio; impreso por Antonio Casañas y dirigido y editado por Francisco Javier Vidal. 
• El Restaurador, periódico de medicina, cirugía y farmacia dirigido por el Lic. D. José Garófalo, e impreso por Díaz y Espinal. En los años siguientes se publica: 
• La Revista Cubana dirigida por Benito José Riera y José Ma. Villafaña. 
• El Comercio que ofrecía los domingos el periódico literario El Dominguillo. 
• El semanario La Cotorra dirigido por Antonio Ma. Lorié y Prisciliano Manzano. • El Centinela Cubano redactado por Pdo. Wenceslao Callejas Asencio y Lic. Antonio Pujals. 
• El Marino a cargo del Lic. Joaquín Manzano. 
• El Diario de Santiago de Cuba dirigido por José Joaquín Hernández. Al iniciarse la guerra de independencia de 1868, surge el 18 de octubre el periódico mambí El Cubano Libre, fundado por Carlos Manuel de Céspedes, al precio de cinco centavos, en un formato estándar de cuatro páginas con siete columnas, dirigido por José Joaquín Palma. El objetivo de esta publicación era divulgar, organizar y orientar a los insurrectos; fue una eficaz arma ideológica. En 1869, durante esta primera revolución independentista en el Oriente cubano, se publican dos periódicos netamente españolizantes:
 • La Bandera Española que se dedicó a la defensa de España en el campo de la prensa, fue órgano oficial del partido conservador y reaccionario, su lema era: “Por España y para España”, tuvo como primer director al jurisconsulto Vicente Bas y Cortés. 
• El Látigo 
En ese mismo año se ordena la libertad de imprenta, acto que resultó poco sincero por parte del General Dulce pues sirvió para espiar y conocer el modo de pensar los cubanos en medio de la declarada confrontación militar iniciada por Céspedes. En medio de este nuevo auge periodístico aparecen: 
• El Ají que él mismo se titulaba periodiquín dominguero y zurrador. 
• El Médico a Palos 
• El Diablo Suelto 
• Lo Pica-pica auto titulado: vermífugo y abrasador. 
• La Campanilla 
• El Bejuco 
• El Perico 
• El Tomate 
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10 Este estuvo unido al Noticioso Comercial hasta 1836 cuando se rebautiza como El Diario Constitucional. 
11 Ver “El redactor”, en El periodismo en Cuba, La Habana, 1941, p. 41 
12 Ibídem. 
 988 • El Guao • La Unión • La Gresca, escrito en catalán, agresivo y anticubano, su lema era: “fuera de España el exterminio”. • El Vespertino, editado por la casa editorial Ravelo e impreso por Gabriel Díaz de carácter principalmente literario, dirigido por Julián Parreño. • La Paz (1872) editado por la casa Ravelo e impreso por el taller tipográfico de los hermanos Martínez. • La Nueva Era (1878) de la misma casa editora, en cuya redacción intervenían Julián Parreño, José Rosell y otros. • El Progreso (1878), contando con su propia imprenta la casa editora Ravelo publica este periódico con la colaboración de Urbano Sánchez, Emilio Puentes, Enrique Trujillo, Julián Parreño, Manuel Odio y Témistocles Ravelo. • El Diario de Avisos (1879), redactado por el Dr. Federico Arze, Pablo Mustelier y Témistocles Ravelo. Tras el advenimiento del Pacto del Zanjón se inició en Santiago de Cuba una etapa en la que el pueblo aspiraba a su mejoramiento social y político, sustituyendo el enfrentamiento armado por el de las ideas, reflejado en la prensa periódica local. Surgen entonces: • El Diario Constitucional, órgano del partido Unión Constitucional, dirigido por Vicente Jústiz y redactado por Joaquín Manzano y Eusebio Faustino Capaz. • El Bien Público de la misma filiación, dirigido por Emilio O´de Aguirrezabal e impreso por Bartolomé Mestres. • La Infancia dirigido por Témistocles Ravelo, redactado por Emilio de los Santos Puentes y José Martínez Badell, impreso por la casa Ravelo. • El Diario de Cuba, periódico de avisos y noticias. • En una plana de La Bandera Española comienza a publicarse El Boletín Oficial de la provincia de Santiago de Cuba. • El Demócrata • El Desengaño • Libertad • El Eco de Cuba inspirado en las ideas del Partido Liberal Progresista. • El Derecho (1882) de la casa editorial Ravelo, hizo actividad política a favor del Partido Liberal. • Revista de Estudios Psicológicos dirigida por Francisco Serret e impresa por Ravelo y hermanos. • El semanario espiritista La Redención. • El Renacimiento • El Correo de las Damas dirigido por el poeta Emiliano del Castillo. • El Ferrocarril dirigido por Agustín Gil de Báez. • El Amigo del Pueblo dirigido por Antonio Poveda Ferrer. • La Revista de Cuba de interés económico dirigido por Pablo Jústiz. • El Diablo Cojuelo semanario satírico dirigido por Desiderio Fajardo Ortiz (El Cautivo). • Cuba Masónica órgano de la comunidad negra, dirigido por Luis Lamarque y que sólo se publicó un número. • El Espíritu del Siglo, órgano de la Sociedad Protectora de las Letras, editado por Cristóbal Bory. • Brisas del Cauto de Francisco Martínez Betancourt. A parir de 1886 se publican: • La Guirnalda, semanario de literatura de José Martínez Badell (Ruy Blas). • El Mercurio de Desiderio Fajardo. • El Cosmopolita de Emiliano Bravo C. • Los semanarios El Callejero, Perro Grullo y La Brocha. • El Heraldo de Luis Lamarque. • El debate, periódico de ideas políticas dirigido por Federico García Sierra. • El Autonomista, órgano de la Junta Provincial de Autonomistas dirigida por Rodolfo Correoso. • Más tarde en la casa editora Ravelo se publicaron La industria y La Autonomía. Las persecuciones políticas a que fue objeto Ramón Navarro por las campañas liberales mantenidas en La Industria obligaron a la suspensión de dicho diario, para salir seguidamente con el nombre de La Patria en 1888. • El Triunfo (1888) de Eduardo Yero Buduén, convirtiéndose en diario al año siguiente, y publicándose por seis años más. • Por estos años aparece el bisemanario La Voz del Comercio de Elías Vázquez. • La Vanguardia dirigido por Rafael Gutiérrez primero, y Luis de Megret después. • El Boletín Comercial. • La Bayoneta dirigida por Félix Clemente Claramonte, oficial retirado del Ejército español, cuyas campañas contra el sentimiento cubano, fue causa de que la chiquillada nativa se negara a venderlo teniendo que utilizar para ello soldados licenciados. Entre los años 1890-1895 surgieron nuevas publicaciones y se intensificaron las campañas políticas, entre estas publicaciones citamos algunas: • La Defensa del Lic. Antonio Bravo. • La Correspondencia de Cuba, editada en la imprenta de Manuel Morales. • El Espíritu del Siglo XIX (1890) fundado por Felipe Hartman, Federico Capdevila y Témistocles Ravelo, órgano del Grupo Libre-pensador “Víctor Hugo”, del cual fue miembro Emilio Bacardí Moreau. • La Fisga dirigida por Enrique Caruago. • El Avisador Comercial de Joaquín Miranda. • El Acicate de Rafael Gutiérrez. 989 • El Correo de Manuel Morales Hernández. • El debate de Saturnino García Álvarez. • La Industria órgano oficial del Centro de Detallistas. • Los semanarios literarios La Pluma y El Álbum de Manuel Yero Sagol e impreso por Guía. • El Revoltoso de Daniel Beltrán y Alfredo Fernández. • El Machete de Victoriano Reineri, cuyas campañas provocaron escándalos y causa de encarcelamiento del director. • El Látigo de Rafael Gutiérrez. • La Democracia por Francisco Pórtela Bustamante. • El Loco por jóvenes colaboradores de El Triunfo que sostenían polémicas de tono racistas. • El Oriente dirigido por Gerónimo Guerra y redactado por jóvenes de la raza negra, entre los que figuraban Miguel A. Balanzó, Manuel A. Barrera, entre otros. • La Reforma dirigido por Enrique Más Otzet, defensor de las ideas reformistas de la política cubana. • La República por Juan Emo. • La Solución. • El Criterio órgano estudiantil de Miguel A. Balanzó y Juan Bautista Sagarra E. • La Defensa órgano de los detallistas. • El Cascabel de Mariano Laguna. • El semanario satírico Los Bemoles. • La revista literaria Prosa y Verso de Joaquín Navarro Riera (Ducazal). En 1894 se publican en la ciudad trece periódicos. Esta cifra decrece considerablemente a partir de 1895 cuando estalla la segunda revolución de independencia en Cuba, hasta 1898 siguen publicándose La Bandera Española, La Reforma y La Patria; y renace en este año El Cubano Libre gracias a la labor de Antonio Maceo, dirigido por Mariano Corona Ferrer y Daniel Fajardo Ortiz hasta 1912. Surgen además nuevos periódicos: • El Día órgano oficial del Centro de Detallistas. • El Pabellón Español. • El Fomento de intereses generales. • España dirigido por Francisco Escoll, defensor del integrismo y de la unión de todos los españoles. • La Revista Masónica, suspendida por el gobierno. • Cuba Masónica por Témistocles Ravelo. • La integralidad Nacional, órgano del comité Conservador, dirigido por Fernando Barruecos. • El Heraldo, órgano oficial del Comité Provincial Autonomista. • El estudio de José Martínez Badell. Terminada la guerra por la independencia, bajo la intervención norteamericana, comienza una nueva etapa para la prensa. Después de 23 días de no publicarse periódico alguno, sale a la luz El Espectador fundado por Rafael Díaz Villasana, que en breve tiempo cambia de nombre llamándose El Cubano the Santiago Herald, que dura poco tiempo, así como El Heraldo Cubano. Seguidamente sale el primer número del periódico Co. F. Enterprice publicado en inglés por los impresores de la Compañía F. del Regimiento de la Infantería número 22 del Ejercito Americano. Surge entonces, el 16 de octubre de 1898, el diario La Independencia dirigido por Alberto Duboy Castillo, editado por la casa impresora de Juan E. Ravelo. Se vendía esta publicación al precio de cinco centavos, con un formato estándar y cuatro páginas de cinco columnas, luego fueron siete. Su lema era “Diario de Información”. La mayoría de las noticias que se publican era nacionales e internacionales, muy pocas locales las que aparecían en la sección de “Crónicas”. En 1898, viene finalmente del campo insurrecto El Cubano Libre, fundado por Céspedes y Maceo. Se traslada a esta ciudad desde Nueva York El Provenir de Enrique Trujillo Cárdenas. Estas dos últimas publicaciones revolucionarias, en la manigua una y otra en la metrópolis americana, eran los voceros de la obra patriótica cubana. Continúan surgiendo nuevas publicaciones en esta época: • La Colonia Española fundada por Emilio O´de Agurrezabal, sustituye a La Bandera Española que no cabía en los moldes nuevos. • El Día órgano de la Colonia Española dirigido por José P. Ablanedo. • Diario de Santiago de Cuba • En 1902 acuerda el alcalde Bacardí la fundación de la Revista Municipal. • La Palma (1902) 13 • Se publica después El pueblo por Bartolo Sagaró. • La República por Constantino Insúa. • El Conservador de Oriente por Prisciliano Espinosa y Rafael Gutiérrez. • El Espiritista. • Después aparece Oriente fundado por Manuel J. Granda. • La Religión • Raza Latina por José Prujadas. • El Oriental por Enrique Jardines. • El Noticiero Cubano por Julio Severino Hernández. • Las Avispas por Juan López Martínez. 13 Este es un periódico manuscrito de corte literario dedicado al sexo femenino. 990 • La Gaceta de Policía por el Dr. Enrique Gómez Planos. • La Defensa de José Morales. • El Mosquito. Se publicaron, no logrando vida larga, las revistas: • Oriente Literario. • La Revista Literaria. • Cuba Ilustrada. • Alba y Ocaso de Juan Ma. Ravelo y Asencio Villalón. • Fémina por Magdalena Peña. • El Pensil por Juan F. Sariol. Durante el resto del siglo XX hasta la actualidad la prensa santiaguera continuó enriqueciendo esta larga lista de periódicos locales coloniales referida en este ensayo. Breve caracterización de los periódicos de Santiago de Cuba Los periódicos decimonónicos de Santiago de Cuba en su mayoría tenían muy corta vida, a excepción de El Redactor, La Independencia y El Cubano Libre, los que lograron una tirada diaria prolongada. Entre sus características más importantes, desde el punto de vista formal, era su formato grande dividido en 5 a 7 columnas cada página, que como promedio eran 4. Las secciones variaban según el periódico, aunque en todos ellos se publicaba una dedicada a las crónicas sociales, elemento que atraía el lector acostumbrado a este tipo de comentarios clasistas, fuertemente condicionado por las circunstancias socioculturales de la época; referente a la lengua escrita utilizado en este tipo de secciones las convierten en un observatorio lingüístico invaluable de este período,14 revelando principalmente sus características léxico sintácticas, lo que permite tanto estudios descriptivos como comparativos de las mismas. En cuanto al contenido, la prensa santiaguera también promovía la publicidad y se dedicaban amplios espacios a los temas populares y avisos a la población. Estos órganos de prensa servían como vehículo de información y orientación (política, ideológica, filosófica, literaria, científica, publicitaria, entre otros) según la filiación de los dueños o patrocinadores del periódico, muchos de ellos pro colonialista, a excepción de algunos casos como El Cubano Libre, El Guao y otros que sirvieron a la noble causa independentista. Las noticias expresaban la opinión de un editor o una casa editorial como voceros del sentir sociocultural de la localidad. Muchas de las noticias trataban temas generales de Cuba y del extranjero, sobre todo de España antes de 1898 y de EE.UU. luego de 1898; un pequeño por ciento se dedicaba a la localidad, donde se publicaban avisos del Gobierno oriental y de otras autoridades (sanitarias, eclesiásticas, cívicas, entre otras). Se presentaba además las listas de aranceles portuarios y otros temas relacionados con las travesías comerciales de las diferentes flotas marítimas, incluyendo la llegada y salida de buques mercantes y de pasajeros. En los periódicos de mayor tirada es notable que se le dedicara amplios espacios al tema literario y cultural, en estas secciones aparecen traducciones de obras maestras de autores famosos, publicaciones de poesías y crítica literaria tanto hispánica como universal. Las traducciones abundan durante la intervención norteamericana de 1898-1902, debido a que la mayoría de la información provenía de las agencias de noticias de EE.UU. Desde la perspectiva lingüística, el aspecto léxico-semántico y sintáctico nos revela a través de estos textos decimonónicos un adecuado uso idiomático del español, en muchos casos hasta impecable; esto permite valorar la evolución de la variante cubana del español en Santiago de Cuba desde muchos ángulos. El bilingüismo es un ejemplo de ello, ya que mediante el estudio de estos textos aportados por la prensa se puede establecer períodos de bilingüismos en la localidad, como producto de un contacto de lenguas directo del español con los idiomas inglés y francés. Este es uno de los infinitos aspectos que pudieran analizarse de dichos textos. Es lamentable que apenas un pequeño porcentaje de estos valiosos materiales se conserven en los fondos de archivos, por lo que urge su recuperación y protección como parte de un legado cultural invaluable para las futuras generaciones. 14 Donde no existen textos orales que nos aporten datos sobre su realización. 

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