"Carnavales" 24X30 Aceite, 1994 Por Salvador O. Martinez |
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viernes, 15 de marzo de 2019
Harriet Tubman
Harriet Tubman, nacida como Araminta Ross en 1820, falleció el 10 de marzo de 1913. Fue una luchadora contra la esclavitud en Estados Unidos. Nació en el Condado de Dorchester, Maryland. Su niñez fue muy dura, como hija de una esclava. Sufrió golpizas desde pequeña. Al crecer, la tenían como niñera en la casa principal de una señora cuyo nombre era “Miss Susan”. Allí sufre castigos por cosas insignificantes. Si el niño se despertaba llorando, la azotaban. Siendo adolescente, sufre una herida en la cabeza cuando es alcanzada por un objeto pesado que había lanzado su propietario contra otro esclavo. Sangrando, regresa a la casa de sus dueños, permaneciendo allí durante dos días sin recibir asistencia médica. Padecerá el resto de su vida visiones y episodios de hipersomnia y dolores de cabeza.
Es vendida a otro comerciante, que le obligaba a trabajar en faenas penosas y duras. Es enviada al antiguo dueño, Brodess, que trata de venderla a otro comerciante, pero al no poder realizar la venta, se queda con los Brodess.
Era una fervorosa cristiana. No pudo aprender a leer, pero había adquirido los conocimientos de la Biblia a través de las historias que su madre le leía.
En 1849 tratan de venderla nuevamente, pero su salud la mantenía en malas condiciones. Ella escapa junto con sus hermanos Ben y Henry el 17 de septiembre de 1849. Éstos volverían a su antiguo dueño. A fin de poder escapar, los esclavos tenían que encontrar la mejor ruta para evitar ser capturados. Había una organización formada por negros libres, blancos abolicionistas y cristianos que pertenecían a la Sociedad de los Amigos, llamados cuáqueros, que ayudaban a los esclavos a escapar de sus dueños, Todos ellos operaban una ruta que fue llamada “Ferrocarril Subterráneo” en el que participaban negros libres y blancos, que conocían el mejor camino para alcanzar la libertad.
Al aprobar el Congreso de los Estados Unidos la “Ley de Esclavos Fugitivos”, quedaron obligados los organismos oficiales a ayudar en la captura de esclavos que habían huido, a quienes se les imponían fuertes castigos por su fuga. Muchos esclavos escaparon hacia Canadá, donde no eran perseguidos.
Harriet Tubman fue llamada “Moses” por los esclavos y los antiesclavistas; ella significaba la esperanza para aquéllos. Se cree, por informaciones dadas por ella misma, que ayudó a escapar hasta territorio libre a más dos mil esclavos. Cuando le preguntaron cuál había sido su inspiración y su religiosidad, dijo “en las Escrituras y en las enseñanzas del Antiguo Testamento”.
Se casó con un negro libre llamado John Tubman; por lo tanto, al ser ella esclava, si tenían hijos, nacían esclavos. Ella se desenvolvía en el Eastern Shore de Maryland. Después del matrimonio, ella le rogó a su esposo que la acompañara en su viaje al Canadá para ser libre, pero él se negó. Se cree que una de las rutas empleadas por ella era ir al noroeste, atravesando el río Choptank y Delaware, y luego hacia el norte para entrar a Pennsylvania. Era un viaje de noventa millas. Ella viajaba de noche, según relata en su autobiografía, “guiada por la Estrella Polar , para evitar a los cazadores de esclavos”. Su principal ayuda la encontró entre los guías del “Ferrocarril Subterráneo” y las “Casas Seguras” que pertenecían a abolicionistas blancos, quienes le ofrecían ayuda y protección, y cuando llegaba la noche podía reanudar sus desplazamientos.
A causa de sus viajes, al pasar el tiempo su esposo se volvió a casar. Ella siguió en sus planes de liberar a otros esclavos. Sobre ella diría Thomas Garrett, que era uno de los abolicionistas de Maryland: “nunca he conocido a una persona, sea del color que sea, que tuviera mayor confianza en la voz de Dios; era como si hablara directamente a su alma”.
En 1858 le presentaron al abolicionista John Brown , que luchaba por erradicar la esclavitud en los Estados Unidos, y ella se unió a su grupo. Él apreciaba los conocimientos que ella tenía sobre las redes de apoyo y los recursos en los estados de Maryland y Delaware. El plan de Brown, de que con la fuerza se podía detener la esclavitud, fracasó con su ataque en Harpers Ferry, donde cayó prisionero y a continuación fue ahorcado. Tubman diría que “Brown hizo más muriendo, que cien hombres viviendo”.
Al estallar la Guerra Civil , ella ayuda en el ejército del Norte, como enfermera en Port Royal, donde preparaba remedios con plantas autóctonas con objeto de evitar la disentería en los soldados. Después de la Proclamación de Emancipación, en enero de 1863, se renueva su espíritu de lucha. Y participa como guía de las tropas del Norte para liberar a los esclavos. A pesar de su servicio durantela Guerra Civil , nunca recibió pensión alguna.
Ejemplo del nuevo billete de $20 en 2020 |
Después de aquella contienda, luchó por el derecho de las mujeres al voto, para lo cual viajó a diferentes ciudades a fin de hablar en pro de las mujeres.
Su vida agitada en su lucha por liberar a los esclavos, y protestar por las violaciones de derechos humanos, llegó a su fin a causa de una neumonía. Fue enterrada con honores militares en el cementerio de Fort Hill, en Auburn. En el Palacio de Justicia de la ciudad hay una placa que dice: “I never run my train off the tracks”
Sobre su vida se escribieron varias biografías: Bradford, Sarah,Harriet Tubman. The Moses of Her People, New York , Corinto Books, 1961.
Conrad, Earl, Harriet Tubman: Negro Soldier and Abolitionist,New York , International Publishers, 1942. Harriet Tubman,Wikipedia, la enciclopedia libre.
Otro autores escribieron sobre su vida. Pero en especial, muchas de las informaciones que sobre ella se reunieron fueron aportadas por Frederick Douglass, quien trabajó a su lado en el empeño de abolir la esclavitud.
Revisado por: Roberto Soto Santana
FRASES IMBORRABLES
Foto tomada de Pinterest |
Málaga (España)
Recientemente, fui a ver la película “Green Book”.
Sentía curiosidad por haberle sido otorgado el “Oscar a mejor película”. Narra
la historia del pianista y compositor Donald Shirley, denostado por su color de
piel a comienzos de los años sesenta del pasado siglo en Estados Unidos.
Como es bien sabido hacen falta años
y esfuerzo para modificar ciertos prejuicios establecidos, pero si no fuese por
el denuedo de nuestros congéneres poco se hubiese avanzado. En un momento de la
película escucho una de esas frases que no pueden caer en el olvido y que
impactan: “Hay que tener la suficiente valentía para intentar cambiar el
corazón de la gente”. John Fitzgerald Kennedy la tuvo y le costó la vida como a
muchos otros.
Existe
otra película, también basada en hechos reales, que narra la vida de la
escritora, oradora y activista por la paz estadounidense Hellen Adams Keller,
ejemplo de auténtica superación, pues una enfermedad a la edad de diecinueve
meses le provocó la pérdida total de la visión y la audición. Lejos de
amilanarse, supo dedicar su vida por lo que creía que, realmente, valía la pena
luchar. Frase de ella es: “Lo mejor y lo más bonito de esta vida no puede verse
ni tocarse, debe sentirse con el corazón”.
Aquello,
que toca la fibra sensible, es lo que mueve al mundo. El ámbito del arte suele
llevar implícito un mensaje que arraigue y dé los frutos esperados.
Cuando
el espectador siente como suyos esos momentos, y se abstrae de su realidad,
para reflexionar sobre el sinsentido de muchos acontecimientos acaecidos a lo
largo de la historia por el odio o por el afán ególatra de alguno de sus
protagonistas es, cuando se consigue avanzar en pro de las libertades y de los
derechos humanos para salvaguardar una existencia digna.
Aprovecho
para mencionar la loable creación del “Pen Club Internacional”, fundado en
Londres en 1921 por Catherine Amy Dawson Scott, entre cuyos objetivos
fundamentales están: luchar por la libertad de expresión y la importancia de la
literatura y de las letras, en general, como medio de entendimiento y
divulgación de la cultura y de esos derechos fundamentales que deben ser
reconocidos en todo ser humano sin menosprecio de los demás.
Cuba: artistas y creadores sometidos a una ola de represión
PEN Internacional denuncia:
Londres, 15 de febrero 2019. PEN Internacional denuncia la ola represiva y las detenciones arbitrarias a las que son sometidos artistas y creadores cubanos independientes, a raíz de la promulgación del Decreto 349. PEN hace un llamado urgente a las autoridades cubanas para que cesen de inmediato la represión contra la libre manifestación artística y creativa
El decreto legislativo, que entró en vigor parcialmente el 7 de diciembre de 2018, busca regular la producción artística independiente, requiriendo el registro y aprobación previa de toda actividad cultural, a través de instituciones culturales afiliadas al gobierno; así como estableciendo restricciones imprecisas a la difusión de contenidos culturales y/o audiovisuales, basándose en vagas descripciones de lo que se consideran contenidos no permisibles. Dichas restricciones incluyen, entre otras cosas, contenidos considerados discriminatorios, violentos, perjudiciales para el desarrollo de la niñez, o que usan los símbolos patrióticos de manera que contravenga la legislación vigente.
El Decreto 349, que se firmó el 20 de abril de 2018 y se publicó en la Gaceta Oficial de la República el 10 de julio de 2018, ha provocado protestas en una parte del sector artístico en Cuba, que considera que someter los contenidos y espectáculos a la autorización previa de entidades estatales puede ser utilizado como una herramienta de censura. Los manifestantes han sufrido acoso y detenciones arbitrarias por hacer uso de su libre expresión como intelectuales y creadores de la isla, al mostrar su inconformidad con la nueva legislación.
Uno de los casos más destacados es la detención de la artista y activista cubana Tania Bruguera, el 4 de diciembre de 2018, y liberada dos días después, quien junto a otros creadores intentó realizar una protesta pacífica a las puertas del Ministerio de Cultura, en La Habana, Cuba. Los artistas Luis Manuel Otero Alcántar, Yanelys Nuñez Leyva y el poeta Javier Moreno también fueron detenidos y posteriormente liberados. Más recientemente, según informes, la poeta Katherine Bisquet Rodríguez fue atacada después de utilizar su lectura de poesía en La Casa de la Poesía, durante la Feria Internacional del Libro en La Habana, como plataforma para demostrar su desacuerdo con el Decreto 349 y con las propuestas reformas constitucionales.
PEN Internacional condena la existencia de este decreto, pide su derogación y hace un llamado urgente al gobierno de Cuba para cesar de inmediato la represión contra la libre manifestación artística y creativa.
Cines de La Habana hasta 1958
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La Habana, una antigua ciudad de cines
5 December 2017
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La Habana, una antigua ciudad de cines
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Publicado por Heydi del Sol on 5 December 2017
Hoy se dice y no se cree…pero, ¿sabías que antes de 1959 la Habana tenía más cines que New York?
Pues sí. Hasta diciembre de 1958, la capital cubana era la ciudad de toda América con más salas de cine. Hoy sobrevive solo una reducida parte de aquellos, pues decenas de los más fastuosos han sido clausurados o reducidos a ruinas.
Ciertamente el cine pegó con mucha fuerza entre los cubanos desde los primeros días de esta invención, y a poco más de medio siglo después de la primera presentación del cinematógrafo por parte de los hermanos Lumiere, para 1958, la capital de Cuba era la que tenía más salas del continente.
La Habana contaba con más cines que Nueva York, Roma, Madrid o París, y algunas estadísticas rebasan el marco continental para afirmar que era la urbe de mayor cantidad de cines de todo el mundo.
Una compilación de estadísticas y fuentes cita que eran más de 130; otro registro habla de más de 170, y uno bien exagerado enumera más de 300. Sin embargo, cifras más o cifras menos entre los cines de estreno, los de lujo, y los más modestos en los barrios, ciertamente esta urbe tenía el raro privilegio de sobrepasar en salas a cualquier urbe del mundo.
Aquellos cines construidos en las primeras décadas del siglo XX, una época en que la capital cubana más que a New York, miraba a París. Se destacaban además por ser excelentes piezas arquitectónicas, especialmente cuando la ciudad sucumbió a la fiebre del Art-Decó. Fue entonces cuando surgieron magníficos exponentes de ese estilo, como fue el caso del América, en la Calle Galiano.
Cine y arquitectura
Tambien lo fue El Fausto, ubicado en el Paseo del Prado y Colón, desde su surgimiento fue célebre por una sala de increíble amplitud. El edificio de estilo Art-Decó que todavía subsiste allí, fue erigido en 1938, una vez demolido el original.
Pero esta sala comenzó a proyectar películas mucho antes, el 15 de noviembre de 1915 y, junto con el Campoamor, fue de los primeros cines habilitados con audio para proyectar películas sonoras.
Cuando El Vedado emergió como barriada de élite los cines establecidos allí fueron reflejo del nivel económico de sus vecinos. De tal forma el cine Acapulco, en la Avenida 26 del Nuevo Vedado, tuvo una de las más modernas y lujosas instalaciones de la ciudad.
Muchos abuelos recuerdan aún sus enormes espejos de filigrana en el recibidor, acorde con el esplendor económico de la burguesía cubana residente en las mansiones de las avenidas del Vedado.
De manera similar otras barriadas y repartos de clase media alta como La Víbora, Santos Suárez, y La Sierra, tenían salas como el Mara, el Santa Catalina o el Roxy.
Es de destacar además que antes de 1959, los cines de los grandes circuitos de estreno, como el Payret, el América, el Acapulco, el Arenal, el Astral, el Lido, el Riviera, y el Ambassador, por sólo citar algunos, estaban conectados con la 20th Century Fox, Columbia o Metro Goldwyn Meyer.
Por su parte el increible Radiocentro, en 23 y L, con sus casi dos mil butacas, pertenecía a la Warner Brothers. Es por eso que en sus primeros años después de su iunauguración se le llamó Warner, hasta que fue rebautizado como Radiocentro, en el conjunto arquitectónico del mismo nombre, que incluía a la gran radio-teledifusora cubana CMQ.
En 1971, el Radiocentro fue rebautizado como Yara. Hoy por hoy, este cine ubicado en el downtown moderno de La Rampa, cuando la Calle 23 desciende como una rampa hacia el Malecón, es el más reconocido de los cines cubanos.
Pero a continuación te ofrecemos una larga lista con algunos de los muchos cines con que recibió la Habana el 1 de enero de 1959:
ACTUALIDADES Bélgica 262, 1700
AGUILA DE ORO Zanja y Rayo, 900
ALBA Ave 51 Puentes Grandes, 900
ALAMEDA Santa Catalina y Párraga, 1400
ALFA 102 y 51 Marianao, 1600;
ALKAZAR Consulado 302, 1700
AMBAR 14 y 15, Vedado, 875
AMBASSADOR 44 y 35, Almendares, 1300
ACAPULCO Avenida 26, Nuevo Vedado, 1500
AMERICA Galiano 257 1775
APOLO Diez de Octubre 446 1330
ARENAL 41 y 30 Kholy 1141
ASTOR Belascoaín 706 1527
ASTRAL Infanta y San Martín 2400
ATLANTIC 23 y 10, Vedado 1500
ATLAS Luyanó 1500
AVENIDA Calzada de Columbia (41), Marianao 1000
AUTOCINE TARARA (500 Autos)
AUTOCINE MEDIODIA Camino Real (Ave 51) y Novia del Mediodía, Arroyo
Arenas (500 Autos)
AUTOCINE VENTO Carretera de Vento (866 Autos)
B'LiSA Ave 51 y 156 1656
BLANQUITA 1ra. y 10, Miramar 6730
CAMPOAMOR Industria y San José 1082
CANDIDO Ave 41 y 100, Pogolotti, Marianao 800
CAPITOLIO Prado 564 430
CAPRI Industria 414 450
CERVANTES Lamparilla 312 1200
CINEACCION Prado y Consulado 507 475
CINECITO San Rafael y Consulado 400
CITY HALL Ayestarán y San Pablo 1396
COLOSO Prensa 315, Cerro 650
CONTINENTAL Jacomino 1200
CUATRO CAMINOS Belascoaín 1077 1625
CUBA Reina 609 900
DORA Luyanó 18 900
DUPLEX San Rafael y Consulado 500
EDISON Cerro 1951 800
ESMERALDA Monte 818 700
FAUSTO Prado y Colón 1669
FAVORITO Belascoaín 809 1528
FENIX Santa Ana 255. Luyanó 680
FINLAY Zanja 376 1300
FLORENCIA San Lázaro 1064 1163
FLORIDA Diez de Octubre 210 1200
GRAN TEATRO Real y Santa Isabel, Marianao 1250
HABANA Mercaderes 311 980
IDEAL Acosta y Compostela 450
INFANTA Infanta 357 1485
LA RAMPA 23 y N, Vedado 900
LAWTON 15 No. 415, Lawton 800
LIDO Avenida 41, Marianao 1118
LOS ANGELES Juan Delgado y Lacret 1400
LUYANO Luyanó 255 1200
LUX Ave 29 y Calle 54 Ampliación de Almendares 1273
MAJESTIC Consulado 210 1110
MANZANARES Carlos III 910 1150
MARAVILLAS Calzada del Cerro 1903 1200
MARTHA Diez de Octubre y Marimón 1400
MAXIM Bruzón 62 1500
METROPOLITAN 13 y 78 Ampliación de Almendares 1300
MIAMI Belascoaín y San Rafael 850
MIRAMAR 5ta. Avenida y 94, Reparto Miramar 950
MARA Juan Delgado No. 6 1051
MODERNO Diez de Octubre 365 1180
MONACO Mayía Rodríguez, Santos Suarez 1300
NEGRETE Prado y Trocadero 1350
NEPTUNO Neptuno 507 800
NORMA Luyanó 702 820
NOVEDADES Reparto San José 710
OLIMPIC Línea 609, Vedado 740
OMEGA Ave. 51, Marianao 1000
PALMA Arroyo Apolo 1100
PATRIA Suárez 56 520
PAYRET Prado y San José 1800
PACIFICO Zanja 210 460
PRINCIPAL Calzada Real, Marianao 1100
RADIOCINE Galiano 257 2600
RADIOCENTRO L y 23, Vedado 1650
RECORD 51 y 100, Marianao 1510
REGIO Monte 564 560
REINA Reina 112 1570
REX CINEMA San Rafael y Consulado 750
REX Pasaje y Cinco, Buenavista 568
RIALTO Neptuno 108 740
RIVIERA 23 No. 507, Vedado 1006
RODI Línea y A, Vedado 1887
ROXY 30 y 21, La Sierra 660
SAN CARLOS 19 y 70, Almendares 600
SAN MIGUEL Lealtad 554, Lawton 570
SANTA CATALINA Santa Catalina y Juan Delgado 1090
SARA Buenavista 600
SHANGHAI Zanja y Manrique 700
STRAND San Miguel 860 1000
TOSCA Diez de Octubre 1007 1100
TRIANON Línea 706, Vedado 1100
UNIVERSAL Egido 511 1048
VALENTINO Esquina de Tejas 850
23 y 12 23 y 12 , Vedado 1492
VERDUN Consulado 214 1350
GOTAS DE SABER Crónica #1
cargo de Roberto Soto Santana,
de la Academia de la Historia de Cuba (Exilio)
Como recordarán los más veteranos lectores, “Gotas de Saber” fue el título de una sección semanal fija que mantuvo durante muchos años el periodista Miguel Ángel Martín en la revista cubana de circulación nacional BOHEMIA –la cual todavía se publica, pero rebajada a fungir periodísticamente como otro pregonero vocinglero más de la Tiranía dinástica instalada en Cuba a partir de 1959-. Era una colaboración tan amena como instructiva, que elevaba constantemente el nivel de conocimiento del público, sin pontificar, como quien no quiere la cosa.
En la misma vena ilustradora, sería de gran contento ir goteando gozosamente en este rincón de PENSAMIENTO unas perlas que enriquecieran nuestras sinapsis o conexiones neuronales con el resultado de que, no siendo posible por ello convertirnos en más listos y quiera Dios tampoco en sabihondos o sabichosos, por lo menos nos haría algo mejor enterados.
“Sic fiat”-en latín, ‘así sea’-, como se diría en “la culta latini parla” (con el subtítulo de “Catecisma de Vocablos para instruir á las mugeres cultas y hembrilatinas”), que es la cabecera de una ingeniosa colección de epigramas con los que el enorme Francisco de Quevedo satirizó, con su vasta cultura y dominio de la lengua española, a “las damas gerigonzas, que parlan el Alcoran macarrónico”, atribuyendo fingidamente la autoría de la escaldante obra a “Aldebrando Anatema Cantacuzano, graduado en tinieblas, docto á oscuras, natural de las soledades de abaxo.”
Entrando en materia, ¿sabía el apreciado lector que a fines del siglo XIX un cubano nativo fue Alcalde de París y Ministro de Obras Públicas del Gobierno de la República francesa?
El mulato cubano Severiano de Heredia, nacido de una pareja de mulatos libres en La Habana el 8 de noviembre de 1836 y fallecido en suelo galo –a causa de una meningitis- el 9 de febrero de 1901, se había naturalizado francés en 1870. En su país de adopción, al que llegó todavía niño en 1845, fue elegido en comicios como Consejero municipal del Barrio parisino de Ternes (17º Distrito) en 1873; desempeñó la Presidencia del Consejo municipal de París –sí, la capital de Francia- entre el 1 de agosto de 1879 y el 12 de febrero de 1880 (fue el primer ciudadano de ascendencia africana que ocupó una alcaldía en toda Europa occidental); en 1881 de nuevo por votación popular pasó a ocupar hasta 1889 un asiento en la Cámara de Diputados, en representación del Departamento del Sena; asimismo sirvió brevemente en 1887 como Ministro de Obras Públicas en el primer Gobierno nacional presidido por Maurice Rouvier.
Se le atribuyen el diseño y la construcción de las mejores carreteras de su época en Francia. Radical progresista, laico y francmasón, durante su ejecutoria pública participó en el Primer Congreso Francés en favor de los Derechos de la Mujer (1878) –como representante del Gran Oriente de la masonería francesa en su Comité de Iniciativa-.
Contrajo matrimonio el 3 de noviembre de 1868 con Henriette Hanaire, con la que tuvo un hijo, Henri-Ignace (1869-1882), muerto por causas accidentales; y una hija, Marcelle (1873-1962), reconocida neurofisióloga que casó con su colega de profesión Louis Lapicque, quienes hicieron hijo adoptivo a su sobrino Charles Lapicque (1898-1988), autor de numerosos trabajos científicos e igualmente reconocido como pintor.
Se retiró de la política tras no resultar elegido en las elecciones legislativas de 1889 y 1893, dedicando el resto de su vida a la historia de la Literatura y a la colaboración en obras benéficas.
Sus restos reposan en un sepulcro permanente en la división 8, fila 1, número 39 del cementerio parisino de Batignolles.
Ha sido el celo del profesor emérito de la Universidad de París VIII, Paul Estrade, el que ha rescatado del olvido histórico a esta eminente figura cubano-francesa, con la publicación de una biografía que lleva como título el nombre de Severiano de Heredia.
La entonces alcaldesa de París, Anne Hidalgo, inauguró en 2015 una pasarela peatonal con el nombre de “calle Severiano de Heredia”, en cuya ceremonia inaugural ella manifestó que “El primer alcalde negro de París y a la sazón ministro de la República Francesa fue rechazado y estuvo relegado durante mucho tiempo entre los olvidados de la Historia. Estamos hoy aquí a fin de corregir esa omisión culpable”.
HOMELESS
René León
Ayer se puede decir comenzó otro nuevo año. Año de incertidumbre en el
país. Diferencias política en ambos partidos. Una ola de refugiados que llegan
a la frontera en busca de trabajo y comida.
La miseria y el crimen los persigue. Grupos armados que buscan en las drogas
una vida mejor.
La América de hoy o más bien dicho los Estados Unidos de América de hoy,
es muy diferente a la de los años 50 o 60 del siglo pasado. Estos grupos de
ideología socialista o “comunista” crean más problema al gobierno.
Pero porque esta conglomeración de refugiados llega a nuestras puertas,
se puede decir. No es un fenómeno nuevo, pero sí de creciente conciencia
pública en América.
A estos refugiados se les llama “homeless”, son personas de todos los
niveles sociales y antecedentes culturales, económicos y raciales, que de
pronto en un lapso de tiempo, se ven precipitados desde su pasiva vida en sus
países, a las calles del odio y la miseria cuando no de la violencia.
En los Estados de América, Homeless puede ser una pareja que no lo
previo todo, solo pensaba en la comodidad de sus vidas, pero no previo la
enfermedad y carencia de seguro de salud. Homeless es también el veterano de
guerra que se encuentra inadaptado a la “paz” posterior de la devastadora
guerra. Pero si lo miramos con fijeza,”homeless” en América, USA, lo puede ser
cualquiera, ninguno de nosotros está exento de la mala racha o mala suerte, que
nos puede poner en esa situación. Homeless puedo ser Yo, por nunca prever esta
larga enfermedad. (Piénsese cómo simplemente perder la salud de un cambio de
ciento ochenta grados a nuestras vidas).
Parece que esta condición de “homeless”, más
que un fenómeno temporal es un estado en que las personas caen y les cuesta
trabajo de salir de ella, y lo difícil que es desasociarse de ella. Las
personas encuentran, soledad, falta de afecto de amigos y familia,
inseguridad…que más tarde lo sustituyen por prostitución, drogas, violencia.
Luego la manera de salir de este mundo, es bien duro y complejo. Parece ser que
se requiere más el deseo de romper con la miseria, la intervención consejos
familiares de barrio, iglesia y del
“Estado”.
Yo quisiera por un momento no solo pensar en mí y en los míos. Es
posible que alguna vez este momento de intranquilidad y de miseria, pudiera
olvidarse. Es posible que algún día dejar de ver niños que lloran de hambre y
no saben lo que es la alegría.
Conceptos un tanto remotos, muchas veces dejados en nuestros países de
origen, empiezan a tomar su más ajustado sentido: la familia, amigos, vecinos,
la iglesia, no importa cual. El volver al AYER, cuando la vida se vivía más
feliz. Las reuniones familiares, o el vecino que nos invita a una barbacoa, o
ir a caminar y volver a soñar, reír y retornar por consejo a Dios.
La tragedia de nuestro día es creer que estamos derrotados, que no
valemos nada. Pero estamos equivocados. Miguel Martín Farto (Cuba), dijo:
“Aprendí que lo que sí es intemporal es el Amor; ese sentimiento tan poderoso que
ayuda a seguir adelante aún en las condiciones más adversas.” Al regresar de su
viaje a Cuba en 2006.
El término “homeless” se refiere a la pérdida de status, carencia de
techo, carencia material. Pero, por otro lado, tiene un significado aún más
radical, significa soledad, falta de amor, descuido, indiferencia y maldad.
Falta del hogar es falta de calor, ternura, falta de esa llama cálida que todo
corazón alberga.
Basta de lágrimas ante el dolor humano que nos arranca la tranquilidad
de nuestras conciencias, es mirar y no ver nada a través de los callos de
nuestra mirada, definitivamente pérdida para ser humana, cristiana, buena,
latina.
Este fenómeno, lleno de nombres y caras, vida social y recuerdos de
tiempos mejores, nos debiera despertar a todos
cada noche cuando nos vamos a dormir cuando en calles y plazas intenta
encontrar acomodo para padecer una noche más. Ser o estar “homeless” sin hogar
es una decisión que no siempre depende de la voluntad propia.
EXISTE AYUDA, EXISTE DIOS.
El mayor mapa del tesoro de la historia
El Ministerio de Cultura documenta y ubica los 681 barcos hundidos en el Caribe entre 1492 y 1898, incluida la Santa María y las naos de Cortés, Pizarro o Núñez de Balboa
En foto, mapa del ataque de Francis Drake a San Agustín, ciudad hispana en la península de La Florida. En vídeo: España ubica y documenta los 681 barcos hundidos en el Caribe entre 1492 y 1898.
Si el pirata Long John Silver tuviese en su poder el informe que el Gobierno español ha tardado cinco años en elaborar abandonaría rápidamente la isla del Tesoro y se lanzaría a saquear el Caribe llevando este documento en la mano. Sabría así dónde se ubica la mítica Santa María (la primera nave europea hundida en América), los barcos que perdió Hernán Cortés en su conquista de México, los que estaban al mando de Francisco de Pizarro o Núñez de Balboa, pero también las coordenadas donde el mar engulló los tesoros más increíbles de oro, plata, esmeraldas o descomunales perlas.
MÁS INFORMACIÓN
Sin embargo, este personaje de Robert Louis Stevenson no tendría vidas suficientes para saquear los 681 navíos que el primer Inventario de naufragios españoles en América, redactado por la Subdirección General de Patrimonio Histórico del Ministerio de Cultura y que hoy revela EL PAÍS, documenta. Tendría en su poder, eso sí, la historia de España entre 1492 y 1898, información que ha coordinado el arqueólogo submarino Carlos León con la colaboración de su colega Beatriz Domingo y la historiadora naval Genoveva Enríquez. Cientos de legajos históricos del Archivo de Indias y del Museo Naval han tenido que ser escrutados minuciosamente, así como 420 planos antiguos, para dibujar el mayor mapa del tesoro español conocido nunca. Un proyecto que se enmarca en la política del Plan Nacional de Protección del Patrimonio Cultural Subacuático de España, desarrollado bajo los principios de la Convención de la Unesco de 2001.
Un experto durante las labores de rastreo de documentos en el Archivo General de Indias.CARLOS LEÓN
El Imperio español basaba su expansión en ambos hemisferios en dos grandes pilares: el ejército y la flota. Pero tras ellos se escondía una armada silenciosa y efectiva, los funcionarios, cuya labor (tomaban nota de los más mínimos detalles de cada expedición) ha permitido ahora la localización de las naves en aguas de Panamá, República Dominicana, Haití, Cuba, Bahamas, Bermudas y la costa atlántica de Estados Unidos. El objetivo no es tanto extraerlos de los fondos marinos, sino preservarlos del saqueo o de posibles daños fortuitos con la cooperación de los países implicados.
El primer barco que se hundió en América fue la nao Santa María el 25 de diciembre de 1492. Esa noche Cristóbal Colón se encerró en su camarote y delegó el mando en un piloto que, a su vez, se lo pasó a un grumete. A las pocas horas, la capitana encalló. El almirante, encolerizado, ordenó el desembarco, para lo que contó con la ayuda de los indios taínos que habitaban en la isla de Bohío (bautizada como La Española). Del cuello les colgaban pequeñas piezas de oro, que pronto intercambiaron con los exploradores por objetos de escaso valor, como cascabeles. Lo que en principio parecía una desgracia, pronto se convirtió en buenaventura. El descubridor desmontó entonces el barco y con sus cuadernas construyó el primer asentamiento europeo en América, el fuerte de Navidad (Haití), donde dejó a algunos de sus hombres.
Tres días después, partió hacia España para anunciárselo a los Reyes Católicos.Pero ya nunca volvería a ver a sus abandonados compañeros: fueron masacrados. De todas formas, no todo el barco pudo usarse para construir el fuerte, por lo que parte de sus restos podrían estar en el lugar donde encalló la nao el grumete, justo en el lugar donde señala el inventario.
De los casi siete centenares de naufragios documentados, solo en el 23% de ellos se tiene constancia de restos arqueológicos. El resto está sin explorar. El país con mayor número de pecios españoles identificados es Cuba (249), seguido de la costa atlántica de EE UU (153), área que incluye las famosas islas de los piratas, y la Antigua Florida (150), una zona que se extendía por los actuales Estados de Texas, Luisiana, Misisipi, Florida, Georgia y Alabama. En Panamá, por ejemplo, se han ubicado 66 naufragios y en La Española, 63.
Carlos León revisa los restos de un naufragio, en el Museo de las Atarazanas Reales de Santo Domingo.
¿Y por qué se hundían? Carlos León explica que el 91,2% de los naufragios tuvieron como origen causas meteorológicas y solo el 1,4% fueron provocados por combates con países enemigos. “Lo de los piratas es más leyenda. Los barcos españoles eran temibles, iban fuertemente artillados y podían cargar decenas de cañones. Daban más miedo ellos a los piratas que al revés”. De hecho, solo el 0,8% de los hundimientos se debe a ataques corsarios.
El cataclismo de estos gigantes marinos —que podían albergar a un millar de personas, entre pasajeros, militares y marinos— provocaba auténticas catástrofes humanas. Cinco naves de la flota de Juan Menéndez de Avilés se sumergieron bajo las aguas en 1563 en las Bermudas causando 1.250 muertes. En el Conde de Tolosa, que naufragó en 1724 frente a las costas de República Dominicana, fallecieron 600 embarcados. Solo sobrevivieron siete que durante 33 días se alimentaron de calabazas y agua de mar agarrados a la cofa del palo mayor.
Cañon de la fragata "Nuestra Señora de las Mercedes', hallado durante las labores de excavación. MINISTERIO DE CULTURA
Pero estas desgracias también trajeron hazañas que nada tienen que envidiar a la literaria de Robinson Crusoe. Los supervivientes del Santa Lucía,capitaneado por Juan López en 1584, lograron alcanzar en lanchas las costas de las Bermudas donde hallaron a otros siete españoles de un barco hundido dos años antes. Juntos construyeron una embarcación, atravesaron el Caribe entre indescriptibles penalidades, pero alcanzaron Puerto Plata (República Dominicana), a 900 kilómetros de distancia en línea recta.
En el inventario del Ministerio de Cultura se detalla la ubicación de cada pecio, el nombre de la nave, el tipo de barco, el nombre del capitán, el armamento y la carga embarcada, así como la tripulación y los pasajeros. Entre los nombres más afamados, además de Colón, que también perdió la nave Vizcaína en Panamá, se pueden leer los de Vicente Yáñez Pinzón (dos carabelas en 1500 en Abrojos, República Dominicana), Juan de la Cosa y Núñez de Balboa (dos naos en Haití, 1501), Francisco Pizarro (una nave en Nombre de Dios, Panamá, en 1544), Pánfilo de Narváez (dos barcos, en Trinidad en 1527) o dos que eran propiedad de Álvaro de Bazán (Santo Domingo, 1553).
En los puertos las flotas del Rey también se hundían, y a decenas. En 1768 se fueron a pique 70 barcos a causa de un huracán en el puerto de La Habana, lo mismo que pasó en 1810 con otras 60 embarcaciones en el mismo abrigo.
Cubertería hallada durante las labores de investigación de la fragata "Nuestra Señora de las Mercedes'. MINISTERIO DE CULTURA
Las naves españolas que surcaban los mares del mundo portaban las más variadas cargas. Entre ellas, los expertos han constatado oro, plata, perlas, esmeraldas y marfil, pero también cerámica Ming, tabaco, azúcar, vainilla o cacao, además de esclavos, artillería, libros o reliquias de Jerusalén. Este azaroso trasiego de riquezas provocó algunos combates con ingleses y holandeses. Así se fueron al fondo del mar, entre otros, los galeones Nuestra Señora del Rosario y Nuestra Señora de la Victoria,en 1590 a orillas del cabo San Antón (Cuba). El Neptuno, Nuestra Señora del Pilar y Nuestra Señora de Loreto en 1762 fueron hundidos por los españoles para obstaculizar el acceso a los ingleses al puerto de La Habana. Y hasta los destructores Cristóbal Colón, Furor, Almirante Oquendo, Infanta María Teresa y Vizcaya, destrozados por la flota de Estados Unidos durante la batalla del 3 de julio de 1898 tras el estallido del Maine. Todos sus pecios son actualmente monumento nacional.
De los ataques piratas se han descubierto pocos restos, algunos en Camagüey (Cuba) en 1603 o tres barcos de 1635 que encallaron tras la lucha contra el corsario. También se ha documentado la carga que lanzó por la borda Juan de Benavides para que no fuera robada por los piratas holandeses en Matanzas (Cuba). De hecho, Benavides no perdió en batalla ningún barco, pero los holandeses le robaron 14, con lo que Felipe IV cuando el capitán regresó a España para relatar el desastre lo mandó decapitar.
Llegar a tierra o mantenerse a flote no siempre significaba la salvación. De hecho, en 1548 una nave se hundió frente a Cayo Largo (Florida). Toda la tripulación sobrevivió pero fueron capturados, esclavizados y sacrificados por los indios Calusa, menos Hernando Escalante, de 13 años, que vivió otros 17 con los indígenas hasta ser rescatado por Pedro Menéndez de Avilés en 1565.
En 1605, el Santísima Trinidad partió de Cartagena (Colombia) y un temporal lo mandó a pique cerca de Santa Isabel (Cuba). Solo quedaron con vida 36 personas, que se subieron a una chalupa con tal cargamento de oro y plata que la barcaza también se hundió. Dos años después, una fragata encalló en la playa de Tienderropa, en Panamá. Sobrevivieron 13 embarcados que alcanzaron la costa, pero allí los cimarrones (esclavos africanos huidos de las plantaciones) los mataron.
LA FLORIDA, PUNTO MILITAR ESTRATÉGICO
Los reyes españoles gastaban enormes cantidades de dinero en Florida, un área en la que no había ni oro ni plata, ni recursos naturales que explotar. De hecho, Felipe II se desesperaba con las inmensas inversiones que los militares le aconsejaban. La razón estribaba en que resultaba un punto estratégico para el regreso de las naves repletas de riquezas porque por sus costas transcurre la corriente marina que lleva directamente a España. Si los británicos la tomaban, el paso de los galeones se vería interrumpido. Así, lo que al principio eran fuertes de madera fueron transformándose en fortificaciones de piedra de las que aún se mantienen muchas en los mares del Caribe.
Curiosamente, estos barcos no solo transportaban lo que los funcionarios reales anotaban, sino una enorme cantidad de productos de contrabando para evitar los impuestos. Por ello, no se conoce exactamente lo que los galeones hundidos podían llevar en realidad en sus bodegas. En el Nuestra Señora de la Pura y Limpia Concepción hay piezas de plata con formas de tapones de corcho en las botijas del cargamento, en el Guadalupe (1724) se ha detectado una colección de más de 600 vasos de vidrio decorado.
Cuando los recaudadores reales descubrían el contrabando al llegar a puerto, los propietarios ofrecían las más diversas excusas. Así han quedado registradas desde el que arguyó que no se había dado cuenta, el que habló de “falta de tiempo” y un franciscano que adujo que como no iba a España “pensaba que no debía registrar el oro y la plata que llevaba”.
La Subdirección General de Patrimonio Histórico solo ha terminado una de las diversas partes que tendrá en el futuro el mapa del tesoro —los especialistas prefieren denominarlo mapa del patrimonio cultural sumergido— del imperio español, ya que el actual se ha ceñido a los hundimientos en el Caribe y en la costa atlántica de Estados Unidos. Quedan por rastrear los del Pacífico, el Atlántico Sur o Filipinas para tener una idea fiel del volumen del transporte marítimo español entre los siglos XV y XIX y de la cantidad exacta de barcos que se perdieron, principalmente por las tormentas en los mares que dominaba España, porque lo de los piratas es más leyenda que otra cosa.
FE DE ERRORES
En la novela de Robert Louis Stevenson La isla del tesoro, La Hispaniola es el nombre del barco en el que navegan los protagonistas hacia la isla en la que se ubica el tesoro. No es el nombre de la isla, tal y como se afirmaba en el reportaje.
Bobby Breen. Niño Prodigio
Rowland J. Bosch (†)
Los niños
prodigios en el campo del canto y de la música han asombrado con su talento
gracias al don conferido. En el canto clásico han sobresalido algunos artistas
infantiles que han enorgullecido a los pueblos en que han nacido. Tenemos por
ejemplo a Joselito en España, cantor y actor quien por varios años asombró al
mundo y muy en especial a sus coterráneos. Recuerdo a Juan Costa Marcote quien
fue su representante en Cuba y de la compañía cinematográfica “Cifessa” hasta
el advenimiento del castrato en Cuba. A Robertino que enorgulleció a los
italianos especialmente con su interpretación de canciones napolitanas, Italia
es un país donde el ver a sus hijos llegar a ser cantante lírico es un sueño de
muchos padres. Lamentablemente esas voces infantiles se pierden al arribar a la
adultez. Esto ocurre casi siempre en el
género masculino, ese fue el caso de Bobby Breen, quien asombró al mundo con su
rostro angelical y como actor y cantante lírico en su infancia.
Bobby
Breen protagonizó una docena de películas. Comenzó su carrera artística a los 8
años de edad cuando hizo su debut cinematográfico con dos cintas en 1936. Breen
había nacido en 1928 en Quebec en la provincia francesa canadiense. Estas
películas fueron “Let’s Sing Again” (Volvamos a cantar) y “Rainbow on the
River” (Arcoiris sobre el río), rodadas por la compañía RKO y estrenada con la
colaboración de la actriz de color May Robeson (Aunt Jemina) y el italiano
Henry Armetto.
Aparte de
ser un buen actor Breen poesía una voz infantil pero con matices operísticos
que encantaba al público de aquella época. Su técnica era impecable. Su hermana
mayor Sally Breen le educó su voz y le enseño música y fue al mismo tiempo su
“coach”. Todo esto le permitió entonar con facilidad arias de ópera como “La
donna e Mobile” de Rigoletto de Verdi y piezas clásicas como el “Ave María” de
Schubert. En 1938 protagoniza “Make a Wish” (Haz un deseo) y “Hawaii calls” con
Ned Sparks, Basil Rathbone y Pua Lani, auspiciado por el famoso cómico Eddy
Cantor.
Por esta
época sobresalía otra actriz infantil Shirley Temple pero Breen poseía una voz
maravillosa en lo que opacaba a la niña artista. En 1939 actúo en “Fisherman
Wharf” y “Way Down South” con un argumento de la época anterior de la guerra
civil en la Lousiana con un elenco escogido: Alan Mowbray y Ralph Morgan.
En 1941
desafortunadamente Estados Unidos se vio
en la necesidad de entrar en guerra con los países del Eje y Bobby como muchos
otros artistas fue escogido para ser enviado al frente de guerra para
entretener a los soldados. Tenía entonces apenas 13 años. Bobby Green actuó con
la alemana nacionalizada estadounidense Marlene Dietrich. En Chile al cantante
y actor Arturo Catica lo comparaban en su patria con Breen y le llamaban el
“Bobby Green Chileno”.
Al
terminar la guerra regresó del frente de guerra. Tenía entonces 17 años de
edad. Al crecer hacia la adultez su voz cambió. Ya no era el (tenor-soprano) de
la niñez, había perdido por completo los
maravillosos y melosos agudos que lo caracterizaban.
Buscó el
apoyo de su compatriota canadiense entonces en boga, la excelente cantante Diana
Durbin, pero precisamente lo que lo hacía insustituible había desaparecido: su
voz. Por aquellos tiempos consiguió un contrato en La Habana para cantar en el
teatro Alkazar. Proyectaban 2 películas de su época de oro y la actuación
personal del cantante que fue un fracaso absoluto.
Como
conocía y dominaba música se integró como director de una banda de baile
británica (los Beatles) pero jamás superó la pérdida de su voz. Murió triste y
olvidado en 1995 a los 67 años de edad. Sin embargo ahí han quedado como
imborrable recuerdo aquellas cintas cinematográficas que asombraron y admiraron
los públicos de todo el mundo.
DE LA VIDA DE LA MEMORIA
(Palabras pronunciadas por el Dr. Eduardo Lolo, representando a la Academia de la
Historia de Cuba en el Exilio, Corp. en la Conferencia “Reafirmación Democrática.
Sesenta años de lucha por la libertad” del Instituto de la Memoria Histórica Cubana
contra el Totalitarismo que tuvo lugar en el Interamerican Campus del Miami Dade
College, en la ciudad floridana de Miami, el 3 de febrero de 2019.)
La historia sin registro no es historia,
sino leyenda. De no haber sido por Xenofonte, Ciro probablemente estaría en
la misma categoría que el Rey Arturo.
La memoria de testigos, víctimas o victimarios de hechos históricos suele desvanecerse con el tiempo y, a la postre,
ser sólo hálito o desaparecida bruma de
tiempo. Su registro fue catalogado por
Cicerón como “vida de la memoria”;
que es decir, el más eficaz antídoto contra su desvanecimiento y posterior desaparición. Dicho registro ha sido objetivo
fundamental de los seres humanos ya
desde las cavernas prehistóricas, donde la sinuosidad del bisonte perseguido por sus
cazadores pintados hace miles de años sobre una pared virgen hizo de la escena un
acontecimiento vigente para cada nuevo observador. En nuestros días, cumple la
misma función un estudiante teléfono celular en ristre cuando detiene en el tiempo
la escena de un baile de graduación o el asesinato de un compañero de clase en una
manifestación libertaria contra un dictador de turno. Las lanzas de los cazadores siguen sin alcanzar al bisonte, la sonrisa de la novia bailando permanece alegremente
intacta, el condiscípulo asesinado mantiene en el aire su última consigna militante.
Han cambiado los medios: de pictografías en grutas atemporales al vídeo del teléfono, pasando por jeroglíficos, palabras prístinas, tabletas de arcilla, rollos de papiro,
libros y revistas para, ya en la actualidad, desembocar en la pantalla de un televisor,
una computadora o un holograma ingrávido. De los hechos acaecidos parte el registro, y de éste la autentificación de los mismos como historia. Hoy, como ayer, el
registro histórico continúa siendo “vida de la memoria.
Ese registro de la memoria puede, incluso, aclarar, enmendar o refutar versiones de
historiadores que, por padecer deficiencias en sus conocimientos o perseguir agendas políticas específicas, hayan pasado por alto, olvidado o escamoteado otros elementos de la definición ciceroniana de la historia tales como ésta ser “testigo veraz
de los tiempos, luz de la verdad… maestra de la vida”. Un claro ejemplo es la obra
de Bernal Díaz del Castillo refutando la versión edulcorada de la conquista de México de Francisco López de Gómara o, de factura más reciente y a nosotros cercana,
los ensayos de temática martiana de Carlos Ripoll escritos en el exilio.
La Academia de la Historia de Cuba en el Exilio, Corp. fue fundada en el área de
New York-New Jersey por un reducido grupo de profesores cubanos de la zona con
vocación quijotesca. Fue oficialmente registrada en el estado de New Jersey como
una corporación no-gubernamental y sin fines de lucro y, posteriormente, a nivel
federal con iguales características. Nuestra institución se propone evitar que los hechos históricos de Cuba y sus destierros se conviertan en leyendas dejando un registro fidedigno de los mismos ‒sin censuras ni manipulaciones demagógicas‒ con el
fin de que nunca pierdan su condición de historia. Sus objetivos fundamentales son
denunciar la falsificación de la historia de Cuba por la historiografía totalitaria enmendando sus versiones apócrifas, y hacer inmune al olvido el decursar vital del
exilio, tanto sus angustias como sus paces, lo mismo sus éxitos que sus frustraciones;
pero en particular su tenaz resistencia al fracaso de la historia.
La membresía de la AHCE se ha extendido, hasta el día de hoy, por otros 5 estados,
en dos de los cuales (California y Florida) se han constituido capítulos formados por
varios académicos, de entre los cuales han sido elegidos democráticamente un Presidente que se encarga de coordinar el trabajo del capítulo y un secretario que tiene
como fin llevar el catastro de sus actividades; hay otros capítulos en estado de formación y varios Académicos Correspondientes (residentes fuera de los EE.UU.). La
AHCE cuenta como medio de difusión con un blog que, por el número de lectores,
ha tenido muy buena aceptación (http://academiahistoriacubaexilio.blogspot.com/),
publica en papel el Anuario Histórico Cubanoamericano (aceptado desde el primer
número como miembro del Council of Editors of Leaned Journals por su seriedad
académica) y ya celebró su Primer Congreso bienal bajo el título de “Salvando la
Historia de Cuba desde el Exilio” con distinguidos ponentes de varios estados. Nuestros miembros dan a conocer sus trabajos sobre la historia de Cuba y sus exilios tanto
en el blog como en el Anuario, el cual se distribuye gratuitamente entre la membresía
y bibliotecas universitarias de los Estados Unidos, además de ofrecerse a la venta
para el público en general en Amazon. También tenemos una incipiente editorial
abierta a todos los asociados para sus obras relacionadas con los tópicos inherentes
a nuestra labor historiográfica.
En particular trabajamos con ahínco para los jóvenes cubanos de la Isla que algún
día puedan tener acceso a nuestras obras, así como para los hijos y nietos de exiliados
cubanos. Para muchos de ellos exilio significa, simplemente, la lejanía de Cuba de
sus parientes. Pierden de vista que el destierro, como trágica experiencia humana,
no es una actividad única de sus familiares. En realidad, el exilio es tan antiguo como
el sentimiento que lo promulga –el odio estatuido– y la fuerza que lo impone –el
poder omnipotente. La intensidad punitiva del destierro obligatorio ha sido asociada,
desde la Antigüedad, hasta con la misma muerte. Ya Diógenes señalaba cómo el
desterrado estaba muerto para su Patria; Publilius Syrus calificaba al exiliado como
“un cadáver sin sepultura”.
Pero el ser humano es paradoja viviente, aun consumado su ciclo de vida. Y
los muertos vivientes del exilio de todas las épocas han asombrado a sus verdugos
con una tenaz permanencia en la tierra de donde tuvieron que huir o fueran expulsados. Todas las lágrimas del desarraigo –sin importar tiempos, culturas o latitudes– tienen el mismo grado de amargura; pero también toda la luz de una misma esperanza. Y
de esa esperanza que –ya lo señaló Esquilo– sirve de alimento al desterrado, nacen y
se desarrollan aportes inconmensurables a la tierra que le es negada a todo exiliado. El
proceso es sumamente complejo y escapa a los objetivos centrales del tema de este
breve discurso, pero creo entreverlo en la pregunta que hiciera Horacio: “¿Qué exilado
de su país escapó de sí mismo?” Como el cubano exilado no puede escapar de sí
mismo, lleva a Cuba dondequiera que vaya. Vive con Cuba no por estar en Cuba, sino
por ser en Cuba. Su Cuba personal –que es mucho más que una suma de nostalgias–
lo acompaña a todas partes: vuelve tórridas las nieves del norte, hace Caribe el Pacífico
lejano, pinta de Habana a Nueva York, Londres, París. O extiende Cuba toda noventa
millas al norte de la historia prostituida. Hay tantas Cubas como cubanos exiliados. La
imagen gigantesca de todas ellas puede ser descrita con solo dos palabras: Patria y
Dignidad. Eso y no otra cosa caracterizan a los padres y abuelos de los niños y jóvenes
cubanoamericanos o de sus contemporáneos todavía esclavos, separados de sus mayores por éstos haber partido al exilio. Hay que enseñarles para que sepan, para que sientan, para que los primeros construyan sus sueños en libertad sobre los sueños sin libertad de sus mayores, y para que los segundos en Cuba los hagan realidad para todos los
cubanos; los de aquí y los de allá. Los investidos en la Academia de la Historia de Cuba
en el Exilio, Corp. somos, en tanto que exiliados cubanos, sobrevivientes de la historia
y, como profesionales, guardianes de la memoria; que es decir, trabajadores de futuro.
Mientras tanto, registrando el presente y con el pasado como “luz de la verdad” y
“maestra de la vida”, procuramos que nuestras investigaciones, publicaciones y congresos, coadyuven a salvaguardar esa memoria con el rigor profesional inherente a
la historiografía sin mordazas ni imposiciones de ningún tipo. De lograrlo, habremos vencido armados de pundonor y autenticidad a quienes fueron nuestros vencedores
por medio de la falacia y la ignominia. En cuyo caso, aunque probablemente los
mayores de nuestra corporación terminemos nuestros días en una tumba incómoda
como es toda sepultura en suelo extranjero, habremos vivido el exilio (y que me
excuse Martí) sin amo, pero con patria.
Muchas gracias.
(Publicado originalmente en el Blog de la Academia de la Historia de Cuba en el
Exilio, Corp.)
EN EL CORAZÓN DE LAS CÍCLADAS
DESDE
LA ISLA DE DONOUSSA
Carlos
Benítez Villodres
Editorial
“Granada Club Selección”. Molvízar (Granada) 218, págs.
René
León
Tampa
(EE UU)
Tomás Carlyle, dice sobre los poetas que
se distinguen de otros, por su forma, estilo y profundidad: “El hombre cuyo
sentido poético se desarrolle de modo que llame la atención de sus
contemporáneos será calificado por estos de poeta. Los poetas famosos, y
también aquellos a quienes debemos considerar perfectos, los confirman los críticos
de igual manera. Aquel que se levante por encima del nivel general de los
poetas vendrá a ser para este y el otro crítico un poeta universal. Todos los
poetas tienen un contacto con lo universal”. Y así podemos ver la obra extensa
de Carlos Benítez.
En el poema “En la bodega de mis recuerdos”, el
poeta nos dice:
“Hay en estas campiñas jazmines de deseos
que aroman tiernamente a las brisas que cantan
al caminante, mientras se recrean
con la miel ofrecida por las náyades
resguardada de inviernos y de otros sinsabores.
De nuevo me florecen los recuerdos
de mi estancia en el bello mundo griego
a pesar de las décadas ya idas
y enterradas en sótanos de humo”.
El
sol con su obra bienhechora invita a ser feliz al poeta a su regreso. Desde el
maravilloso día, hasta el jugar alocado de unas nubes que juegan en lo alto del
cielo. Si mi querida Donoussa. A veces
la tristeza invade mi ser y no se captar el motivo. Puede ser hasta la propia
belleza de la naturaleza; o la lejanía de los seres amados; o porque nuestra
mente forja pensamientos donde el pesar oprime el corazón; puede ser un sueño
en que se nos aparece un rostro de bella mujer.
En la Isla encantada de Donoussa,
al regresar el poeta, se siente feliz, puede ser un sueño. Cree ver el rostro
de una bella mujer y con una sonrisa irónica se burla de él. Todo es posible en
ese regreso maravilloso para él. Pero hay un hecho cierto, cuando el virus de
la nostalgia nos invade hasta la atmósfera se hace su cómplice.
Desde
la Isla de Donoussa es un poemario que nos lleva por esas islas del
archipiélago griego. Ella forma parte de las llamadas pequeñas Cícladas, que también incluyen: Irakia, Koufonissis y Schnoussa. El 14 de septiembre de todos los años un
sinnúmero de personas asiste a la gran fiesta de Stavros. El poeta al llegar a
la edad de 18 años a la isla, ya lo esperaban, me imagino, compartiendo con los
vecinos y las enamoradas que debe haber tenido. Una pequeña comunidad que le
ofreció amistad y cariño.
En
su poema Donoussa, Un paraíso en el Egeo,
el poeta nos dice:
“Cuando desembarque en la desconocida
y minúscula isla de Donoussa,
un viento caluroso azotó con sus látigos
mi cuerpo sudoroso. En el puerto se hallaban
esperando unos jóvenes
que fueron informados en qué barco venía
cargado de ilusiones y de sueños.
Los muchachos y el día estaban muy alegres”.
El
poeta se siente dichoso ha llegado nuevamente al lugar deseado. Un cielo azul,
entrecruzado por lentas y blancas nubes y, un sentir algo nuevo, inexplicable,
subyugante, dulce, aterciopelado, se incrusta en forma tenue, vivificante en el
alma, y una sonrisa brota de sus labios, ha llegado a su isla soñada después de
sesenta años de partida. Se siente el trino de las aves. Y a lo lejos el
ding-dong de la campana aprisionada en la torre de la iglesia, en espera de su
larga ausencia.