Mercedes Torrens de Garmendía †) (Cuba)
Era un molino; era una rueda;
giraba hasta no más;
molía trigo y avena
sin cesar.
Un día se paró la negra rueda;
no quiso girar más
y no molió ni el trigo ni la avena,
ya nunca, nunca más.
Así mi corazón, la hora tras hora
¡ay! late sin cesar
Porque el Amor le manda; y late y late
Con ritmo siempre igual.
Y un día parará como la rueda;
no querrá latir más;
aunque el amor le mande, nunca el triste,
su ritmo impulsará.
Mercedes Torrens de Garmendia es una de las figuras injustamente olvidadas del Parnaso cubano.
ResponderEliminarNació en la ciudad de Matanzas el 24 de septiembre de 1886 y falleció en La Habana en el año 1965. Fue maestra de instrucción pública durante más de un cuarto de siglo, así como profesora de piano, solfeo y teoría. Viajó por México, los EE.UU., Canadá y gran parte de Europa. Fue colaboradora de "El Correo de Matanzas", "El Imparcial" y algunas revistas suramericanas.
Publicó los libros "Fragua de estrellas", La Habana. Talleres Tipográficos de Carasa, 1935. "Jazminero en la sombra" (poemario), La Habana, Talleres Tipográficos La Mercantil, 1942."La flauta del silencio" (poemario), La Habana, Molina, 1946. "Jardines del crepúsculo" (poemario), La Habana, Molina, 1948. "Esquila en el poniente" (poemario), La Habana, P. Fernández, 1951. "Fuente sellada" (poemario), La Habana, P. Fernández, 1956.
Fue objeto de críticas favorables por parte de José María Chacón y Calvo (Diario de La Marina, 1 y 8 de agosto de 1948), Óscar Fernández de la Vega (Revista de la Biblioteca Nacional José Martí (oct.-dic. 1957), y Cintio Vitier (Cincuenta años de poesía cubana, la Habana, Ministerio de Educación, Dirección de Cultura, 1952).
Fue uno de los cuarenticinco intelectuales fundadores del "Grupo Índice", creado el 3 de marzo de 1935 en reunión efectuada en la casa número 126 de la calle Milanés de la ciudad de Matanzas, en calidad de "agrupación que estimulara el amor por las bellas artes, las ciencias y la literatura y que al mismo tiempo aunara a los principales intelectuales de la ciudad en un proyecto cuyo objetivo esencial fuera el deseo de rescatar el esplendor espiritual que en tiempos atrás tuviera Matanzas y por lo que fuera llamada la Atenas de Cuba".