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lunes, 1 de abril de 2013

Buenos Amigos y Buenos Abriles, no entre Miles (del refranero español)



Eliana Onetti (†)

  Así reza uno de los muchos y variados refranes que obran en el acervo popular. Regocijémonos, pues, cuando, puestos a pensar, nos demos cuenta de que hemos tenido la gran fortuna de encontrar, a lo largo de nuestra existencia, un buen amigo. Un Amigo, -y lo escribimos con mayúscula- es una rara avis que todos los hombres no tienen la suerte de encontrar y disfrutar.
 Mencio dijo:”La amistad es una sola mente con dos cuerpos”.
Khalil Gibran dijo: “Un amigo es una dulce responsabilidad; nunca una oportunidad”.
George Santayana dijo: “La amistad es casi siempre la unión de una parte de una mente con una parte de otra”.
José Martí dijo: “Tiene el leopardo su abrigo/ en su monte seco y pardo./ Yo tengo más que el leopardo/ porque tengo un buen amigo./ Tiene el conde su abolengo./ Tiene  su aurora el mendigo./
 Tiene ala el ave./ Yo tengo allá en México un amigo”.
  Un amigo es un alma gemela que se nos da sin esperar nada a cambio, con todo desinterés. Es más desinteresado la amistad que el amor, porque no hay en la amistad dosis alguna de egoísmo. El amigo escucha con interés, consuela con misericordia, aconseja con buena voluntad y tiene siempre la mano abierta y tendida y el hombro presto y la mirada limpia. No piensa nunca el amigo: “Hoy por ti; mañana por mí”.
  Las relaciones humanas son variopintas. Está la familia, que abriga; el vecino, que regocija y auxilia; el amante, que reciproca; las relaciones sociales, que se renuevan constantemente a lo largo de nuestra existencia y acompañan, sobre todo, cuando tenemos algo que ofrecer... Y el amigo, que, cercano o ausente, nos reconforta siempre porque es como un segundo Yo.
  La realidad es que al amigo se le reconoce en los momentos de aflicción. Ése que no necesita palabras para comprender-
nos. Ése que, con sólo ser, nos da calor. 
  Y verdaderamente, es uno entre miles. Para encontrarlo, eso sí, es necesario que sepamos también nosotros ser un amigo y recordar en todo momento que en la amistad desprovista de todo interés constituye uno de los más raros y hermosos regalos de la vida.
¡Feliz Semana de la Amistad, amigos todos!

2 comentarios:

  1. Eliana Onetti tiene mucha razon en este escrito. Hay personas que dicen ser amigos, pero en los momentos dificiles nadie los ve. Ella como editora tenia amigos de esos que dicen serlo, pero cuando la enfermedad de ella llego. No se acordaron de todo lo que ella hizo por ellos. Por eso lean este escrito, por lo real que s .

    Rene Leon
    Editor

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  2. Hermoso artículo éste de nuestra inolvidable amiga, la escritora cubana Eliana Onetti. Es difícil encontrar a ese amigo, que por su fidelidad y el amor que nos ofrece podemos considerar como a un hermano. Ese que está contigo en las malas y en las buenas. Ese que nada pide a cambio de la solidaridad que ofrece. El que de verdad lo encuentra, tiene en sus manos la mayor riqueza.

    Herminia D. IBaceta

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